El país de los deseos
Aquel cine suponía la zona franca. Allí donde la verdad de las cosas no importaba y los anhelos se convertían en sucesos. Al menos, durante un par de horas. Ella y yo solíamos ir al cine. Siendo amigos solamente, jamás compartimos nada más allá de lo que la amistad concede. No fuimos pareja, no mantuvimos ninguna relación y nunca le robé un beso, pese a que era el mayor de mis deseos