Cuánto más peligro tiene un imbécil, que un malvado.
Que me lo digan a mí, que más de una vez mi vida ha estado en serio peligro por culpa de más de un/una imbécil. Por eso mi margen de tolerancia está bajo mínimos.
Pero vamos a lo que importa:
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Artículo de Arturo Pérez-Reverte publicado en XL-Semanal.
PERMITIDME TUTEAROS, IMBÉCILES
Cuadrilla de golfos apandadores, unos y otros. Refraneros casticistas analfabetos de la derecha. Demagogos iletrados de la izquierda.
Presidente de este Gobierno. Ex presidente del otro. Jefe de la patética oposición. Secretarios generales de partidos nacionales o de partidos autonómicos. Ministros y ex ministros -aquí matizaré ministros y ministras- de Educación y Cultura. Consejeros varios. Etcétera.
No quiero que acabe el mes sin mentaros -el tuteo es deliberado- a la madre. Y me refiero a la madre de todos cuantos habéis tenido en vuestras manos infames la enseñanza pública en los últimos veinte o treinta años. De cuantos hacéis posible que este autocomplaciente país de mierda sea un país de más mierda todavía.
De vosotros, torpes irresponsables, que extirpasteis de las aulas el latín, el griego, la Historia, la Literatura, la Geografía, el análisis inteligente, la capacidad de leer y por tanto de comprender el mundo, ciencias incluidas. De quienes, por incompetencia y desvergüenza, sois culpables de que España figure entre los países más incultos de Europa, nuestros jóvenes carezcan de comprensión lectora, los colegios privados se distancien cada vez más de los públicos en calidad de enseñanza, y los alumnos estén por debajo de la media en todas las materias evaluadas.
Pero lo peor no es eso. Lo que me hace hervir la sangre es vuestra arrogante impunidad, vuestra ausencia de autocrítica y vuestra cateta contumacia. Aquí, como de costumbre, nadie asume la culpa de nada. Hace menos de un mes, al publicarse los desoladores datos del informe Pisa 2006, a los meapilas del Pepé les faltó tiempo para echar la culpa de todo a la Logse de Maravall y Solana -que, es cierto, deberían ser ahorcados tras un juicio de Nuremberg cultural-, pasando por alto que durante dos legislaturas, o sea, ocho años de posterior gobierno, el amigo Aznar y sus secuaces se estuvieron tocando literalmente la flor en materia de Educación, destrozando la enseñanza pública en beneficio de la privada y permitiendo, a cambio de pasteleo electoral, que cada cacique de pueblo hiciera su negocio en diecisiete sistemas educativos distintos, ajenos unos a otros, con efectos devastadores en el País Vasco y Cataluña. Y en cuanto al Pesoe que ahora nos conduce a la Arcadia feliz, ahí están las reacciones oficiales, con una consejera de Educación de la Junta de Andalucía, por ejemplo, que tras veinte años de gobierno ininterrumpido en su feudo, donde la cultura roza el subdesarrollo, tiene la desfachatez de cargarle el muerto al «retraso histórico». O una ministra de Educación, la señora Cabrera, capaz de afirmar impávida que los datos están fuera de contexto, que los alumnos españoles funcionan de maravilla, que «el sistema educativo español no sólo lo hace bien, sino que lo hace muy bien» y que éste no ha fracasado porque «es capaz de responder a los retos que tiene la sociedad» , entre ellos el de que «los jóvenes tienen su propio lenguaje: el chat y el sms». Con dos cojones.
Pero lo mejor ha sido lo tuyo, presidente -recuérdame que te lo comente la próxima vez que vayas a hacerte una foto a la Real Academia Española-. Deslumbrante, lo juro, eso de que «lo que más determina la educación de cada generación es la educación de sus padres» , aunque tampoco estuvo mal lo de «hemos tenido muchas generaciones en España con un bajo rendimiento educativo, fruto del país que tenemos» Dicho de otro modo, lumbrera: que después de dos mil años de Hispania grecorromana, de Quintiliano a Miguel Delibes pasando por Cervantes, Quevedo, Galdós, Clarín o Machado, la gente buena, la culta, la preparada, la que por fin va a sacar a España del hoyo, vendrá en los próximos años, al fin, gracias a futuros padres felizmente formados por tus ministros y ministras, tus Loes, tus educaciones para la ciudadanía, tu género y génera, tus pedagogos cantamañanas, tu falta de autoridad en las aulas, tu igualitarismo escolar en la mediocridad y falta d e incentivo al esfuerzo, tus universitarios apáticos y tus alumnos de cuatro suspensos y tira p’alante. Pues la culpa de que ahora la cosa ande chunga, la causa de tanto disparate, descoordinación, confusión y agrafía, no la tenéis los políticos culturalmente planos. Niet. La tiene el bajo rendimiento educativo de Ortega y Gasset, Unamuno, Cajal, Menéndez Pidal, Manuel Seco, Julián Marías o Gregorio Salvador, o el de la gente que estudió bajo el franquismo: Juan Marsé, Muñoz Molina, Carmen Iglesias, José Manuel Sánchez Ron, Ignacio Bosque, Margarita Salas, Luis Mateo Díez, Álvaro Pombo, Francisco Rico y algunos otros analfabetos, padres o no, entre los que generacionalmente me incluyo.
Qué miedo me dais algunos, rediós. En serio. Cuánto más peligro tiene un imbécil, que un malvado.
No hay duda que el Sr. Pérez Reverte dice aquello que piensa sin andarse con medias tinta. Tampoco hay duda que tiene fama de buen escritor, posiblemente bien merecida.
Pero cuando leo este artículo me pregunto lo que tantas otras veces con lo escrito por otras personas de no tan reconocida valía. ¿ Dónde están las soluciones ?, como en esas otras ocasiones únicamente hay crítica. Y las críticas sin aportar soluciones se acercan peligrosamente a la más completa inutilidad.
Saludos
Información Bitacoras.com…
Valora en Bitacoras.com: Cuánto más peligro tiene un imbécil, que un malvado. Que me lo digan a mí, que más de una vez mi vida ha estado en serio peligro por culpa de más de un/una imbécil. Por eso mi margen de tolerancia está bajo mínimos. Pero vamo…..
En eso tienes toda la razón.
Un abrazo Grumph
Es que es una columna de opinión simplemente, y aun así yo creo que la solución se sobreentiende leyendo un poco entre líneas, o al menos yo lo hago.
un saludo
En ocasiones, señalar un problema es suficiente para que, aparte de darnos cuenta del mismo, la solucion sea obvia.
Por otra parte, yo siempre expongo el mismo ejemplo. Con 8 años a mi me enseñaron que existia otra base, aparte de la base diez. Aprendi binario. Eso me permitio 3 o 4 años despues empezar a chapurrear en ensamblador de Z80.
Mi sobrino, nacido en el 93, no sabe que es binario.
¿Jugamos a las diferencias?
El día que en educación «la solución sea obvia» el mundo mejorará y mucho. Desgraciadamente la experiencia docente indica que no hay tal.
Estamos ante un tema complejo, que precisa mucho tiempo de investigación, y que ( o mucho me equivoco ) cualquiera que fuera la opción elegida, no dejará a todos contentos.
No es la primera vez que leo la opinión del Sr. Pérez Reverte sobre temas educativos: «Soy jacobino, creo en una educación férrea y medieval». Aún y con ello, «leer entre lineas» como comenta Derfel se presta, en general, a interpretar más lo que nosotros queramos del escrito que lo que el autor deséa expresar.
Lo cierto es que mi comentario «encerraba entre lineas» mi hartazgo a las críticas sobre la enseñanza, quizás porque es temática recurrente entre los compañeros de profesión.
No he visto que se hagan manifestaciones multitudinarias, ni huelgas masivas, a pesar de tantas críticas como he oído.
Si realmente se siente que es un problema tan importante, aporten soluciones, no «entre líneas» sino planes claros, manifiestos y activen los mecanismos para que se lleven a cabo. Hay ejemplos en nuestra historia, que demuestran que con suficiente presión pública los dirigentes reaccionan
Saludos
Veo que me despisté y en el anterior comentario no me identifiqué como Grumph
Aprovecho el error para comentar que a pesar de lo escrito, no puedo dejar de agradecer al Sr. Pérez Reverte las horas placenteras que me propició la lectura de sus novelas, y que sus artículos de opinión en más de una ocasión me han hecho fijarme en detalles, cosas que merecían un poco más de atención o mirarlas desde otro punto de vista
Astharot: Yo soy de vuestra generación, y no aprendí nunca binario en la escuela (lo aprendí gracias al ZX Spectrum, pero eso es otra historia).
Si hay diferencias, pero son otras. Por ejemplo los comentarios de texto (que reconozco que odiaba), brillan por su ausencia. Los niveles de física, quimica y matemáticas han descendido, y en general el nivel de exigencia y esfuerzo.
Como apunta Grumph, la solución pasa por el análisis, pero no olvidemos que es debido al «análisis», que hemos llegado a la mierda que tenemos ahora. Cuando Pérez-Reverte dice que cree en la educación «Férrea y Medieval» no lo dice literalmente, ni que haya que volver a la escuela del reglazo en la mano. Se refiere a que si tiene que haber *disciplina* y que los alumnos que no la sigan tienen que ser castigados de alguna manera, y no defendidos a ultranza por sus padres.
Si un alumno suspende, pues suspende. Eso no tiene que suponer un «trauma» para toda la vida. Es una lección que significa aprender que a veces fracasamos en la vida y que tenemos que perseverar y luchar (limpiamente) por nuestros objetivos y no esperar a que nos lo den todo hecho. Si fuera un trauma haber suspendido, incluso con un cero, entonces media España estaríamos traumatizados.
En fin, que los conceptos de «esfuerzo», perseverancia, disciplina y pensamiento crítico han desaparecido en 10 años y ha sido reemplazado por el concepto de «demandar» y exigir (eg. exijo que me aprueben). Es asombroso. Ahora esto ha llegado a la universidad, con el nombre de Reforma de Bolonia. Pronto veremos a «profesores» con problemas de comprensión verbal, y si no, al tiempo.
Conforme. Totalmente cierto que, aunque existan soluciones obvias (como la que se apunta de «si suspende, pues se suspende») existen un monton mas de matices necesarios para la mejora del sistema y los que mejor los conocen son los que se dedican a la enseñanza.
Lo que yo trataba de apuntar era que, esta claro que la primera solucion es ir retomando el «nivel» de antaño y en segundo lugar una mayor severidad (no me gusta esa palabra, pero no doy con la idonea) en la aplicacion del sistema.
¿Sera tambien que nos hacemos viejos y siempre lo pasado parece mejor? :)